Además de sus canales, pasear por sus calles de fachadas blancas, y toparnos con sus iglesias, hace que la visita merezca la pena.
Iglesia de la Vera Cruz |
El interior de la Vera Cruz |
Capilla de San Gonzalito |
Iglesia de la Misericordia, preciosa por dentro, y un lugar ideal para esconderse del sol |
Y por supuesto, su catedral, la iglesia de Santo Domingo, la catedral es del siglo XV, aunque su puerta es de estilo Barroco.
Aunque sin duda, lo mejor de Averio son sus Ovos Moles, un dulce hecho a base de azúcar y huevo, envuelto en una fina oblea, con forma de pez o de barril, totalmente deliciosos.
Muy cerquita de Aveiro se encuentra Costa Nova, un pueblo pesquero famoso por sus casas con las fachadas de azulejos a rayas, donde pasamos la tarde, por fin, dándonos un baño en una de las espectaculares playas de Portugal.
Las originales casas de Costa Nova |
Y la playa |
Recomendamos esta excursión, pero de nuevo Aveiro seguro que se disfruta mucho más en otra época del año con menos calor. Aunque no esperéis una Venecia pequeña, solo un pueblo con encanto con unos anchos canales.
En el próximo post, visitamos dos ciudades del norte de Oporto, Braga y Guimaraes.
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